En ocasiones
temo que haya algo ahí fuera,
que me salude, airoso,
tras una larga condena
de olvido poco victorioso.
En ocasiones,
vierto todo mi tiempo
en creerme que esta espera
cesará en algún momento,
sin que nadie la detenga.
En ocasiones,
divago cual ente incierto,
en esta encrucijada, tan densa,
que se espesa en mis adentros:
y no es que no me atreva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario